sábado, 25 de abril de 2009

Ecología

El día después de mañana, ¡es hoy!
Greenpeace demanda que los gobiernos actúen de inmediato ante el cambio climático, a la luz de las más recientes y alarmantes advertencias de la comunidad científica internacional sobre las amenazas que representa este problema en caso de que no se reduzcan en forma drástica las emisiones de gases de efecto invernadero.
El último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (PICC) reunido en París, concluye que, si continuamos actuando como hasta ahora, es probable que las temperaturas medias globales suban para 2095 entre 1.1°C y 6.4°C por encima de los niveles que tenían entre 1980 y 1999, lo cual ocasionaría más sequías, peligrosas olas de calor, inundaciones y huracanes más fuertes, el derretimiento rápido de las capas de hielo y un aumento en el nivel del mar. “Cabe destacar una buena noticia y es que ha mejorado enormemente nuestra comprensión del sistema climático terrestre y del impacto humano en él.

La mala noticia es que cuanto más sabemos sobre el clima, más precario se presenta el futuro. De aquí se saca un mensaje claro para los gobiernos:
la ventana de acción se estrecha rápidamente. Si el anterior informe del PICC fue como un despertador, éste último equivale a la alarma de una sirena de bomberos", dijo en París Stephanie Tunmore, responsable de la campaña de energía y cambio climático de Greenpeace Internacional.
El informe de los científicos señala que ha aumentado la certidumbre de que las actividades humanas están ocasionando el cambio climático global y que este fenómeno está provocando un aumento en la intensidad de las tormentas tropicales (una conclusión a la que no habían llegado los científicos); dicho aumento tiene correlación con el aumento de la temperatura superficial del mar. El incremento previsto en la temperatura global llevaría a la progresiva eliminación de la capa de hielo de Groenlandia, lo cual elevaría el nivel del mar entre 6 y 7 metros. Por ello, para evitar los impactos más catastróficos del cambio climático, la semana pasada Greenpeace presentó el informe [R]evolución Energética, un estudio detallado de cómo, hacia 2050, con energías renovables y eficiencia energética, el mundo puede reducir el 50% de las emisiones de CO2 globales aún con el aumento de la población mundial y sin frenar su crecimiento económico. “La ciudadanía está haciendo un claro llamado a los gobiernos para que se pase de la retórica a las políticas claras de prevención, al impulso de las energías renovables, a la aplicación de programas de ahorro de energía, a la búsqueda de soluciones contundentes que involucren a la sociedad. El cambio climático no hace distinciones y avanza más rápido de lo estimado. No hay tiempo que perder; sociedad, industrias, comunidad científica y gobiernos tenemos que trabajar para que las futuras generaciones tengan a donde llegar”, afirmó Patricia Arendar, directora de Greenpeace México. Qué es el cambio climático: El cambio climático se está gestando a cada momento debido a la quema excesiva de combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas). Su combustión produce grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), cuya progresiva acumulación en la atmósfera acentúa el "efecto invernadero" y, en consecuencia, cambia el clima global. Científicos de todo el mundo estiman que las alteraciones de los patrones climáticos ocasionarán transtornos en diversas regiones debido al aumento en las inundaciones, deshielos y aumento del nivel de los océanos, desertificación de zonas templadas y semiáridas; muchos ecosistemas cambiarán radicalmente; es previsible una crisis en la producción de alimentos y la migración de millones de "refugiados ambientales"; el suministro de agua potable se verá afectado; las enfermedades se expandirán. Se estima que los mayores impactos recaerán sobre las naciones menos desarrolladas. La mejor manera de frenar el cambio climático es hacer un uso eficiente de la energía y desarrollar en forma decidida las energías renovables.